Desde hace ya tiempo sabemos que enviar el mismo correo electrónico a toda la base de datos de clientes no es adecuado. Hay diferentes tipos de clientes y, lo que para algunos puede ser información relevante, puede llevar a otros darse de baja de las comunicaciones y no volver a comprar.
Los CRMs ayudan a esta clustering de los clientes, es decir, a agrupar a los clientes por preferencias de compra o sus características sociodemográficas. Estas técnicas también pertenecen al campo de la IA y están por detrás de las principales herramientas de gestión de clientes. Lo que nos permiten es hacer un perfilado de los potenciales clientes.
Sin embargo, hay un paso siguiente al que hasta ahora no se podía llegar. Tras agrupar a los clientes en categorías podíamos lanzar comunicaciones específicas o hacer anuncios personalizados a este grupo de clientes; pero escribir una comunicación específica para cada uno de los clientes (totalmente personalizadas para cada uno de ellos) no era posible.
Los modelos de lenguaje natural nos permiten generar una comunicación específica para un cliente o grupo de clientes tras haberle dado un prompt. Por ejemplo, le podemos indicar en el prompt: “Escribe un email ofertando un portátil a un cliente que es muy sensible al precio, dentro de un segmento low-cost, y que preste atención especial a su vinculación como miembro del club de socios. Es un cliente joven y que le gusta recibir una comunicación con un tono informal y directo”.
A partir de este prompt, el modelo de IA nos generará un cuerpo de email para todo este segmento de clientes e incluso puede personalizar al usuario si le damos la información precisa. Lo que conseguiremos con esto es que cada cliente reciba un email dirigido a él, diferente al que recibe cualquier otro, y que comunique con precisión lo que necesita y puede moverle a una acción de compra.
Si, además, añadiéramos una imagen personalizada, creada con un modelo de IA como Flux o Stable Difussion, nuestro email podría ser aún más efectivo, pero a día de hoy la tecnología de generación de imágenes aún tiene que dar un paso adelante en estabilidad y madurez como para hacer esto.
El beneficio de usar la IA para la comunicación con los clientes es la hiper-personalización y, por tanto, generar una comunicación que demuestra la atención personal a cada cliente y que, además, mejora la tasa de conversión de las acciones de marketing de la empresa.